El desarrollo de un MVP (Producto Mínimo Viable) es un paso esencial para una startup, ya que ayuda a probar el concepto del producto con usuarios y clientes potenciales, permite recibir comentarios de los clientes en una fase temprana proporciona una ventaja competitiva. Reclutar un equipo de desarrolladores de software experimentados es un desafío. Un equipo subcontratado establecido puede ser una opción de bajo riesgo para lanzar rápidamente un MVP que cumpla con los estándares de calidad requeridos. También permite  a las startups acceder a la experiencia de un grupo de profesionales especializados y adaptar el tamaño y el conjunto de habilidades del equipo a las necesidades cambiantes de su proyecto, mientras controlan los costes. Por lo tanto, contratar a un equipo externo puede ser una mejor opción para una startup que formar un equipo interno para desarrollar su MVP.

Prueba de concepto del producto: los beneficios de desarrollar un MVP

Desarrollar un MVP es importante en una startup por varias razones. Ayuda a probar el concepto del producto con usuarios y clientes potenciales desde el principio, reduciendo así el riesgo de invertir grandes cantidades de dinero en un producto que puede no tener éxito. También permite recibir comentarios de  los clientes en una fase temprana que se pueden utilizar para refinar y mejorar el producto. Por último, puede proporcionar una ventaja competitiva, ya que el producto puede lanzarse al mercado más rápido que los competidores que adoptan un enfoque más tradicional para el desarrollo de productos.

Para desarrollar este MVP es, sin embargo, esencial contar con un buen equipo de desarrollo de software.  Deben tener las habilidades necesarias para comprender los requisitos y desarrollar un producto que cumpla con los objetivos comerciales y las necesidades del cliente.  Deben funcionar bien como equipo. Deben comunicarse bien, colaborar, centrarse en la calidad, responsabilizarse, ser flexibles y respetarse mutuamente.

Subcontratar frente a formar un equipo interno: ¿Cuál es la mejor opción para las startups?

Para las startups, elegir entre la subcontratación y la creación de un equipo interno de desarrollo de software para su MVP puede ser una decisión difícil que puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso del proyecto.

Si bien la creación de un MVP internamente puede ser una opción (especialmente cuando se desea tener más control del proceso), la creación de un equipo de desarrollo interno eficaz puede ser un gran desafío.  Por otro lado, la subcontratación de un equipo de desarrollo de software externo puede ofrecer numerosas ventajas.

La subcontratación del desarrollo de un MVP puede ser una opción rentable, ya que la creación de un equipo interno requiere inversión en contratación, formación y equipos, y la startup puede terminar con un equipo de desarrolladores sobredimensionado una vez que se complete el trabajo inicial de desarrollo.  Al subcontratar, las startups pagan solo por el trabajo realizado, ahorrando costes significativos.

Otra ventaja de subcontratar un MVP es que puede ahorrar tiempo. Contratar y capacitar a un equipo de desarrollo de software interno puede llevar mucho tiempo, y en un mercado competitivo como el actual, puede resultar difícil y costoso encontrar el talento adecuado. Con equipos externos, las startups pueden acceder a un conjunto de expertos con amplios conocimientos de programación en áreas muy variadas.  Como los recursos externos ya funcionan como un equipo (han trabajado juntos en muchos proyectos), a menudo tienen experiencia en desarrollar productos rápido y pueden entregar un MVP funcional en un plazo más corto.

La subcontratación del desarrollo de software también proporciona acceso a habilidades y experiencia especializadas, lo que reduce el riesgo de ejecución. Los equipos externos a menudo tienen una gama más amplia de habilidades y experiencia que un equipo interno, lo que les permite aportar conocimientos especializados al proyecto y un historial comprobado de haber desarrollado muchos otros proyectos.

Las startups también pueden beneficiarse de la flexibilidad que proporciona la subcontratación. Escalar hacia arriba o hacia abajo según sea necesario es mucho más fácil cuando se subcontrata, ya que las startups pueden evitar problemas de personal y capacitación. Esto es especialmente ventajoso para las startups que trabajan con recursos limitados y están enfocadas en controlar sus costes.

Por último, la subcontratación de un MVP permite a las startups centrarse en sus competencias empresariales básicas. Al subcontratar el desarrollo de software, las startups pueden centrarse en el desarrollo de negocio o el marketing, áreas que son clave especialmente en las primeras etapas de desarrollo del proyecto.

Para las startups que afirman  que el uso de un equipo de desarrollo de software externo implica la pérdida de control sobre el proceso, una buena solución podría ser contratar a un equipo de desarrollo de software interno muy pequeño que supervise el proyecto y trabaje como un nexo entre las líneas de negocio de la startup y el equipo externo.

Una vez que la compañía ha lanzado el MVP y los esponsor han confirmado su apoyo continuado, el equipo interno puede ayudar con la transición gradual hacia un desarrollo de software completamente internalizado. Esta transición, sin embargo, no tiene porque ocurrir de la noche a la mañana ya que muchas startups funcionan durante algún tiempo con un enfoque híbrido hasta que el modelo de negocio está probado y existe una cierta tracción del negocio.

En conclusión, la subcontratación de un  MVP a un equipo de desarrollo de software externo puede ofrecer a las startups muchos beneficios, incluida  la rentabilidad, el ahorro de tiempo, el acceso a habilidades especializadas, la flexibilidad y la capacidad de centrarse en las competencias básicas. Al subcontratar el desarrollo de software, las startups pueden crear un MVP que muestre su producto o servicio, al tiempo que minimiza los costes, los riesgos y maximiza la eficiencia.  Para aquellas startups que desean tener un mayor control sobre su proceso de desarrollo de software, contratar un equipo interno muy pequeño puede ayudar con la supervisión del proyecto y la transición futura del desarrollo de software a un equipo interno.